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| A. Camacho y Rubalcaba (periodistadigital.com) |
Así pues, algunos miembros de la propia policía avisaron a los terroristas para que huyeran, siguiendo órdenes de todavía nadie sabe quien pero todos los dedos (al menos los míos) señalan a Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro del interior de entonces y actual candidato a la presidencia y el actual ministro del interior y secretario de estado de seguridad especializado en terrorismo Antonio Camacho.
Hoy se ha conocido la sentencia del juez que estudia el caso, Pablo Ruz. En ella imputa a 3 altos cargos de la policía nacional: el ahora ex-director general de la policía Victor García Hidalgo, el jefe superior de la policía en el país vasco, Enrique Pamiés y el inspector de Vitoria, Jose María Ballesteros. Los cargos contra ellos son naa más y nada menos que COLABORACIÓN CON BANDA TERRORISTA. No creo que pueda haber algo más denigrante para un policía que lucha contra el terrorismo. Estos "patriotas de pacotilla" a los que sus hijos van a señalar en la escuela, van a ser los cabeza de turco de no se sabe que personaje relevante ¿del ministerio del interior quizás?. Van a perder sus empleos, sufrir la deshonra de la acusación y puede que tengan incluso cárcel por impedir la detención y desmantelar la operación de meses contra nada más y nada menos que la financiación mediante extorsión a empresarios vascos de la banda terrorista ETA.
Pero lo que no se han exclarecido han sido los motivos. Algunos dicen que era porque había un topo al que no se quería destapar, otros que las negociaciones del gobierno en secreto con la banda terrorista podían peligrar y yo pienso que es que había pruebas de negociación directa del ministro del interior o algún otro cargo importante del gobierno con la banda terrorista, y si no le daban tiempo a los etarras (o a los policías) a borrar las huellas, podría salpicar al gobierno.
El hecho, es que poco después se detuvieron de nuevo a todos los implicados, pero ya les habían dado tiempo a borrar las huellas, disminuir los cargos, y quizás que desaparecieran las inculpaciones posibles contra ciertos drigentes.
Es una vergüenza que policías, fuese por el motivo que fuese, alertasen a terroristas. Pero lo que es una vergüenza aun mayor, es que esos "mandados" vayan a cargar con todo el peso de la ley con incluso penas de cárcel y la exclusión social y laboral para defender a aun no se sabe que persona les dio las órdenes. El que sea es "un puto cobarde" y ellos unos héroes de la inmundicia.
2 comentarios:
Bajo mi humilde opinión. Si mi jefe me pide que haga algo ilegal, ilícito, denigrante, inmoral o que va en contra de mis principios, el hacerlo es únicamente mi decisión y mi responsabilidad.
Habrá que demostrar quien es el jefe, siempre invito a esperar a que las sentencias se dicten. Olvidamos que a veces los "manda más" son únicamente iconos representativos poco funcionales, quimeras, que ni cortan y pegan, hay quien todavía cree que Bill Gates ha programado alguna vez algún producto de Microsoft.
Por otro lado, si a mí me piden que haga algo ilegal y no denuncio a esa persona, el primer culpable sería yo, al permitirlo.
Legalmente hablando, la única forma de librarse de pisar la cárcel por un asesinato es probando que te pusieron una pistola en la cabeza y te dijeron que o apretabas o te mataban. El resto... dinero, chantajes, intereses... No están contemplados como eximente.
Enhorabuena por el Blog, está muy cuidado y me resulta muy profesional.
Un abrazo tertuliano.
Muchas gracias Nosiro, se intenta hacer lo mejor posible, aunque no siempre se consiga.
Es un tema muy interesante del cual iba a escribir un artículo estos días, inspirado por una mini-conversación que tuve con Jose Ángel el otro día. ¿Cuánto vale la vida humana? ¿Todo el mundo tiene un precio? ¿Qué serías capaz de hacer para mantener tu estatus social?
Algunos dicen que lo del caso faisán ocurrió porque dieron orden de abortar misión. Eso es muy común en operaciones de drogas y terrorismo, dejando escapar al pequeño para cojer al gran camello o al Josu Ternera de turno. Pero el policía que recibió la orden dijo que se lo mandaran por escrito, que no iba a abortar una misión de esa importancia asumiendo el mismo las consecuencias.
Como la "sombra" no quiso dar nada por escrito dijo: "Esta misión la desmantelo yo por mis santos cojones", y ordenó al jefe superior de la policía del país vasco que le diera el chivatazo directamente al del bar. Este llamó por teléfono al director general de la policía y como sabía que los teléfonos estaban pinchados se acercó con su propio móvil y se lo dió en mano al del bar. Así se le informó de todo y reventó la operación de forma ilegal e inmoral. Porque al final el juez Marlasca junto con una jueza francesa volvieron a pillarlos al cabo del mes y medio a todos. No pillaron a nadie superior, con lo cual se descartaba la hipótesis del "mal menor".
A mi cuando me han pedido algo ilegal o rarito, lo he pedido que me lo pasaran por escrito, no hace falta hacerse el digno, ya que los jefes son cobardes y saben que es ilegal, pero quieren que te manches tú. Decirte que el 100% de las veces, al final no me lo han pasado por escrito y la orden ha quedado inerte. Es una buena fórmula para evitar mamoneos.
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